El Comandante Carreño relató a la actual dotación parte de sus experiencias, entre ellas los desafíos de la navalización de la Unidad, el proceso de entrenamiento de la primera dotación y la primera comisión antártica desarrollada en 1991, en donde dentro de las principales tareas estuvo el apoyo logístico a Base Naval Antártica “Arturo Prat” y el rescate del yate alemán “Freydis”
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Una emocionante jornada se desarrolló a bordo del ATF 67 “Lautaro”, unidad con casi 31 años de servicio en la Institución, con la visita de su primer comandante, el Capitán de Fragata Jorge Carreño Morchio, quien estuvo al mando de la Unidad entre el 21 de diciembre de 1990 y el 31 de diciembre de 1991.
El Comandante Carreño recorrió las diferentes dependencias del “León del Estrecho”, observando los diferentes cambios que se han realizado en su estructura y recorriendo los rincones por los cuales tuvo que tomar decisiones en diferentes labores encomendadas por la Armada de Chile en diferentes zonas del país.
En la ocasión fue acompañado por el actual Comandante del ATF 67 “Lautaro”, Capitán de Corbeta Ramón González Escobar, con quien intercambio diferentes impresiones sobre las experiencias desarrolladas en el buque, especialmente en el Territorio Antártico Chileno, en donde durante la última comisión se alcanzó el Círculo Polar Antártico, superando difíciles condiciones meteorológicas y navegación.
El ATF-67 “Lautaro” fue construido el año 1973 en Noruega como tug/supply vessel, siendo su primer nombre “Maersk Tender” para, posteriormente, ser comprado por un armador mexicano como “Navimer I”, hasta su incorporación a la Armada de Chile en 1990.
Los primeros meses del ATF 67 “Lautaro” incluyeron un proceso de navalización, destacando la transformación de estanques de lastre a petróleo, más tarde complementada con una cubierta de vuelo desmontable, dando inicio a una historia cargada de versatilidad y tareas extraordinariamente diversas que hacen valorar la presencia de este tipo de buques en la Institución.
El ATF-67 “Lautaro”, en sus más de 30 años de servicio, ha demostrado la polivalencia de este tipo de unidades, cumpliendo tareas en las cinco áreas de misión de la Armada y aportando en la consolidación del Territorio Chileno Antártico.
Es de esta manera que su primer comandante relató a la actual dotación parte de sus experiencias, entre ellas los desafíos de la navalización de la Unidad, el proceso de entrenamiento de la primera dotación y la primera comisión antártica desarrollada en 1991, en donde dentro de las principales tareas estuvo el apoyo logístico a Base Naval Antártica “Arturo Prat” y el rescate del yate alemán “Freydis”, nave que el 24 mayo de 1991 quedó atrapada por los hielos sobriviviendo su tripulación, compuesto por un matrimonio de origen alemán, en el refugio antártico existente en la zona y contando con el permanente monitoreo y apoyo radial del entonces Comandante de Base Naval Antártica “Arturo Prat”, Capitán de Corbeta Carlos Rodríguez.
El rescate realizado fue de alta complejidad, logrando al tercer intento rescatar al yate y su tripulación, desvarándolo mediante remolque y realizando inspección con la partida de buzos de la Unidad, para posteriormente remolcarlo hasta Bahía Chile para las reparaciones necesarias para que la nave alemana pudiese seguir navegación.
En la ocasión se realizó una formación con la presencia del Comandante en Jefe de la Tercera Zona Naval, Contraalmirante Leonardo Chávez Alvear, en donde el actual Comandante del ATF 67 “Lautaro” destacó parte de la historia y los hitos de la Unidad, agradeciendo la visita entregándole un presente consistente en una fotografía de la Unidad en el Territorio Chileno Antártico, recibiendo el regalo con emoción y agradeciendo la oportunidad después de 30 años de volver a la histórica Unidad.
El Capitán de Fragata Jorge Carreño manifestó que “volver al buque después de 30 años es una emoción muy grande, es como volver al pasado y recordar los bellos momentos que significo el haber sido el comandante del “Lautaro” en 1991”.
Comento además que “ver todos los avances que se han logrado a través del tiempo, las mejoras realizadas, habla muy bien de la Armada de Chile, de sus oficiales y gente de mar, todo lo que han hecho al igual que todas las tareas que ha realizado el ATF 67 “Lautaro” durante los casi 30 años que ha estado navegando y desplegándose al Territorio Chileno Antártico”.
