25 junio 2022

Fogón Concepción

El 24 se junio se realizó un fogón en el restaurante Tiralomo ubicado en la cieudad de concepcion.

Los asistentes fueron:

Jorge Buzeta, Carlos Piderit, Michael Manley, Alejandro Konig, Juan Pablo Brito, Tomas Wilson, Sergio Pizzagalli, Eduardo Buzeta, Rómulo Mandiola, Luis Kolhs, Jorge Raab







22 junio 2022

Historia - Odisea Naval

Autor: Hermonth Solis Campos (Nv.) "Mambito"


Alrededor del fuego de una parrillada, nos encontramos varios amigos y familiares conversando y riendo de buena gana. Uno de mis sobrinos se acerca a mi lado y pregunta:
- Tío, ¿qué es una odisea?
Mi mente rebusca una respuesta fácil...
- Bueno, se refiere más que nada a un viaje largo, rodeado de aventuras y desventuras, o sea, de cosas buenas y malas en general. ¿Por qué la pregunta?
- Porque escuché hace tiempo que eso es algo que viven a menudo los marineros...y tu estuviste en la Armada.
Lentamente llevo una copa de vino a mi boca, doy un sorbo y fue como destapar un baúl de recuerdos en mi cabeza con lo que me dicen.
El calor de las brazas es agradable, acompañado de más personas ahí; con la vista perdida por un instante mientras fluyen imágenes vívidas en mi mente. Como si fuese ayer lo que hice.
- ¿ Le tocó pasar por alguna odisea tio?
Sabía que en algún momento de mi vida esa pregunta llegaría. ¿Cómo le explico?
Lo medito con calma, lo miro y comento:
- La verdad es que, solo un marino puede entender y comprender a cabalidad lo que vive y también sufre otro hombre de mar. Lo que te contaré brevemente espero que entiendas e imagines lo que se da a bordo de un buque.

ATF "COLO-COLO". Marzo de 1997.

Con la RIA ya aprobada, nos sentimos tranquilos para seguir operando este año, con nuevos integrantes de la dotación, entre los cuales se encuentra el C1 (Mn.) Sanchez, un "baqueano" de remolcadores, quien viene desde el ATF "GALVARINO".
Otro Maniobra es Juan Barría, el "Barry",con experiencia en el ATF "LEUCOTON"; además de personajes muy particulares como los "hermanos macana" (Serrano, un Marinero artillero y Madariaga, un C2 Mecánico artillero) que juntos en el zodiac eran infalibles junto al C1(Art.) "Gino" Cofré.
En la cocina era habitual ver juntos al Mayordomo "Matechasca" (experto en motores bencineros y que siempre salvaba a los chanchitos con el motor fuera de borda) y al Cuky que apodaban "cornelio" (experto en platos bien elaborados y uno que otro regaloneo culinario).
La entretencion corría por cuenta del S2 (Ab.) Perez, un chilote de tomo y lomo que no podía salir a navegar.....sin su acordeón, el alma de todo asado de camaraderia en cubierta.
También estaba el "Huaso" Alvez, nuestro control de averías y soldador y otros más que hicieron historia a bordo del "cacique".
Nos dan la orden de dirigirnos a Talcahuano, para hacer un periodo corto de reparaciones y después, al regreso, continuaremos con nuestras tareas.
Todo en el "chute" marcha sin inconvenientes.
Sanchez, siendo el Contramaestre, nos decía a todos que era muy importante el cuidado, así como el correcto armado y empleo de la linea de remolque; pues siendo un remolcador de flota, ese siempre sería nuestro "tiro de combate".
Se completan las reparaciones pendientes, pasamos las pruebas de aceptación sin problemas y ya podemos regresar a casa. Nos escapamos por la Boca Chica de la Bahia de Concepcion para tomar track oceánico.
Ya está terminando la primera semana de mayo.
El ingreso por el Chacao se presenta con corriente a favor, lo hacemos con 6 nudos de corriente a favor, sin angustias ni sorpresas. Pero al terminar ese pilotaje llega un mensaje que nos deja desanimados.
En el muelle de Puerto Montt nos esperan para efectuar carga de enseres y material para dirigirnos de inmediato a cumplir con el relevo de la dotación de isla Guafo. La visita a casa debe esperar.
Luego de hacer atraque a "muelle de goma" enfilamos rumbo al sur por aguas interiores con el fin de llegar pronto a esa remota isla; esta vez viene otra noticia sobre la marcha: un frente de mal tiempo se desata en el área y debemos esperar en el puerto de Quellón a que mejoren las condiciones. La espera se hace eterna, al sexto día recién podemos dirigirnos a Guafo y se cumple con la tarea de relevos.
¡Ahora si que vamos a casa! Imaginamos estar en nuestros hogares compartiendo con la familia, alrededor de la estufa a leña, contar nuestras vivencias, apoyar a la familia con nuestra llegada.
Recalamos a puerto de noche. Portalon abierto y mañana tendré libre. Es 18 de mayo y recién llego a casa a eso de las 22:30 hrs. Mi esposa está con fiebre, presenta un cuadro de amigdalitis y mi pequeño hijo de 2 años me mira sorprendido por mi llegada.
- No te preocupes, ya estoy en casa para cuidarlos, ahora yo me encargo.
Un débil "Gracias" puedo escuchar de vuelta. Pero ya estaba ahí; era lo importante.
Al dia siguiente escucho que tocan insistentemente la puerta. Son las 10 de la mañana.
-¿Quien será?
Al abrir la puerta veo un compañero de dotación del buque y lo que me dice me deja helado:
-Tenemos zarpe de emergencia, debemos irnos de inmediato a bordo.
- No pude contener esa frase que sale del alma: "¿me estás hueveando?"
- Para nada, es real.
Miro a mi mujer, a mi hijo.....debo despedirme y al salir veo a las esposas de mis compañeros mirándose entre sí, sorprendidas aún con la noticia. Tengo la garganta apretada de tristeza y solo puedo decirles: "Por favor, cuidenla".
-No te preocupes, entre todas nos apoyamos.
Arriba del colectivo, mientras bajamos hacia el puerto, me sigo preguntando si es real esta situación. Al llegar al puerto me indican que "Charlie Oscar" ya zarpó y que vayamos a la rampla a embarcar en el zodiac.
Una vez a bordo me dan la orden:
- Prepare las cartas, nos dirigimos a Talcahuano.
Nos mirábamos sin saber qué estaba pasando, la incertidumbre era general y entre todos lanzabamos teorías de qué podría estar ocurriendo.
De nuevo salimos por el Chacao, rumbo general norte, acompañados de un viento del sur de mediana intensidad.
Antes de recalar al molo 500, ya veíamos carros cargados con todo tipo de materiales. Cables de todo tipo, espías, jarcias, cadenas por montón y varias anclas, de las que una sobresalía por su tamaño.
- Trajeron el ancla del acorazado "Latorre"- me indican los maniobras- un trozo de historia a bordo.
Esa mañana todo era misterio y confusión. Me dirijo a la caseta del molo para usar el teléfono público y llamar a casa para saber cómo estaban. Cuando me preguntan : "¿Cuando regresas?"
-No lo sé, solo tengan paciencia. Fue lo único que pude decir.
Al terminar de hablar se me acerca el SO (Rd.Cic.) Jorge Rosas, quien fuera uno de mis instructores en la Quiriquina.
-Hola Solis, ¿Cómo estás?
-Muy bien mi Suboficial, aquí en faena de carga en el "Colo-Colo".
- Oye, ¿es verdad que se varó una fragata?
- No tengo la menor idea, solo nos ordenaron venir de Puerto Montt hacia acá.
- Ya, que les vaya bien entonces, cuídense.
- Muchas gracias, lo haré.
Me despido y regreso a bordo, hay muchas historias en el aire, pero nada concreto.

Zarpamos cerca del mediodía, saliendo ahora por la Boca grande. En un momento se hace llamada a la dotación para dar lectura al mensaje que nos llega.
"Unidad debe dirigirse al norte, a la bahia de Pisagua para prestar apoyo a la LST "Valdivia".Nuestras caras de sorpresa eran evidentes, era el buque más grande en ese momento en servicio.
Comenzaba a nacer la "Operación Junin".

"Charlie Oscar" tiene una velocidad de 11,6 nudos. Un fuerte viento del sur de 30 nudos nos acompaña. Sanchez y "Barry" se pasean por cubierta mirando y con una idea en mente: sacar provecho a la naturaleza.
Pide las venias respectivas al Comandante (CC Gastón Massa este año) y ejecuta su plan.
Entre ambas chimeneas se despliega el toldo que usualmente se arma en cubierta para ceremonias, a modo de vela, para aprovechar el "surazo" que nos acompaña. No conforme, empiezan a salir las cenefas que se ponen en la pasarela del portalón. Empiezan a salir "velas" improvisadas con la sigla ATF 69 COLOCOLO, las que van desplegadas en el palo de popa, arriba de las chimeneas.
El "huaso Alvez" se entusiasma y empieza a soldar anillas a un tubo de acero. Se termina y queda como una botavara; la cual se coloca en el palo de proa con presencia de más lonas del pañol de maniobras. Así por única vez en su existencia, el ATF ColoColo, hará una navegación mixta, impulsado por sus dos motores y las velas en ambos palos. Con ese ingenio, se logra navegar a 12,6 nudos.
Es el 20 de mayo.
Al dia siguiente, fuera de toda tradición, el 21 nos sorprende en altamar. Una fecha en la que normalmente un marino se encuentra en tierra, en ceremonia o desfile.
Pero una cosa no cambia: navegamos con tenida 11, solo los de guardia en la máquina van con buzo de trabajo. El ST Pedro Roca, Oficial Piloto, se ofrece voluntario para estar solitario en el puente de mando, apoyado por el sistema de piloto automático, solo tiene que ir situándose en carta con ayuda del GPS y atento a las comunicaciones. La dotación: almuerzo de camaraderia.
Está de más decir que la empanada no fue acompañada con jugo de fruta, o que posiblemente el rancho tendría algún aliño que provocó alergias y disfunciones en el habla. Lo que sí se vio fue mucha risa, fortaleza y esperanza en cada uno de esos hombres; en que podríamos ser un gran aporte y pieza vital en la tarea que se venía por la proa.
Al amanecer del 24 de mayo arribamos a Pisagua. Lo que vimos ahí nos dejó estupefactos.
En la playa, totalmente atravesada, golpeada sin piedad por las olas. Como una ballena varada que agoniza sin mayor esperanza, se encontraba la "Valdivia".
Se planifica cómo hacer llegar el remolque a la barcaza. Las aguas son poco profundas y no podemos acercarnos a menos de 400 yardas, tendremos que hacer una línea mensajero y así conectada a otras espías de menor a mayor grosor hasta llegar al extremo del cable de sacrificio (penalty wire) que debería hacerse firme a bordo de este gigante. Se envía al bote, los hermanos "macana" hacen lo suyo con las espías adujadas dentro del zodiac. Pasan un par de horas y se logra por fin conectar.
De a poco, conforme pasan los dias, van sumándose más unidades a la tarea de rescate, dirigidos por un mando que adopta el nombre de CORSACUAR.
Se intenta girar el buque para sacarlo de esa incomoda posición, pero es tarea infructuosa. La poca profundidad, la succión de la arena en el casco y las olas, hacen que las fuerzas de los rescatistas se vean ínfimas.
Se improvisan ideas como hacer detonaciones bajo el agua mientras se tracta a toda fuerza, pero tampoco sirve. Solo cabezas rotas con la lluvia de piedras que quedó.
Llegan más unidades, aparece el "Lautaro", el rompehielos "Viel", fragatas, destructores, patrulleros.
Muchos expertos que llegaban al lugar eran lapidarias con su opinion: "Es imposible lograrlo".
Usar esa palabra generaba escozor general. Cuando te dicen que no podrás, que es imposible....es ahí, en ese momento, donde afloran otras virtudes y vas con todo a dar la pelea.
Los días pasan y pasan, ya es el mes de junio y solo hemos podido girar esta mole, dejando su popa hacia el mar.
Una gran roca ha perforado el casco y con eso impide que se pueda desplazar. Hay que perforar y dinamitarla. No hay otra solución.
¿Momentos de peligro? Claro que sí los hubo.
Cuando estábamos tratando había una ola de fondo que llegaba de improviso y eso hacía que el buque cabecera, generando un cambio en el equilibrio y a su vez, el cable de remolque se podía frenar en algún borde para posteriormente liberarse al bajar la popa. Lo sé porque al pasar cerca de popa (era obligación usar casco) llega esa ola y sin percatarme el buque empieza a girar lentamente hacia estribor con el cable frenado en el borde de popa. Al levantar la proa, veo que el cable viene hacia mi cara. Solo atiné a arrojarme al piso, pasó a solo centimetros por arriba. Si, me dolió el costalazo. Pero eso era mejor antes de recibir sepultura.
Otro día voy acercándome al sector de la caseta del towing, a nuestro costado estaba el "Yelcho" y más allá el "Lautaro".
En plena tracción aparece esta ola de fondo, que ocasiona un peack de tensión en los cables. Ese fue el único momento de mi vida que escuché una particular explosión: era el "Lautaro" que sufre el corte de su cable de remolque de 2 pulgadas. La naturaleza cobraba caro. Afortunadamente recala a los dias el ATF "Janequeo" (cojito pues solo podía navegar con 1 motor, pero apoyaba logisticamente) con un cable de repuesto.

Durante cada jornada, el T1 Hidrografo Cuneo, con su teodolito en tierra reportaba los avances. A veces 1, o 2 metros, a veces nada o simplemente lo ganado lo podíamos perder en una noche con oleaje.
¿Descanso? En ocasiones podíamos ir a Iquique para poder hablar con calma por teléfono a casa, pues con 4 teléfonos en Pisagua y la cantidad de marinos como población flotante, era en realidad complicado.
Estar en iquique era agradable de día, El drama era de noche, pues en el Calique, debíamos dormir a veces en el suelo o en un sillón por falta de camas. Pero no importaba. Una llamada, una palabra de aliento era todo lo que te hace falta para continuar.
De vuelta bordo, surge una nueva táctica de trabajo. La roca fue destruida después de un largo y complicado proceso. Se agrupan las unidades en 2 direcciones. Una apuntando al noroeste, donde estaban los buques escuadra y el rompehielos; la otra hacia el suroeste. Principalmente por los remolcadores. A contar de ahora haríamos tracciones alternadas, para hacer los famosos "twist".
Sin hacer mención, los comandantes de las unidades auxiliares hicieron un pacto, el cual se llevaría a cabo en un día especial....y ese día se acercaba.
Después de varios días haciendo "twist" con la barcaza, un día pasa algo:
Es temprano, mes de julio, una suave brisa corre en el mar, esta nublado pero agradable temperatura. El CORSACUAR emite por radio como todos los dias:
"Al general de CORSACUAR, en el nombre de Dios, se da inicio a la tracción, agrupación norte comenzar a tractar al 60%"
Los acuses de recibo se van sucediendo ordenadamente hasta llegar al 90 % de traccion, después nos toca a nosotros actuar.
"Agrupación norte, parar de tractar, agrupación sur, tractar al 60%"
Así también nosotros hasta llegar al 90%.
Después de varios giros, salta el equipo de comunicación de tierra:
"Corsacuar, de tierra. Se aprecia que buque se está desplazando, van 4 metros.....6 metros.....8 metros.....15 met.......20.....se escucha de fondo que alguien grita a rabiar: ¡zafó! ¡zafó!
Ambas agrupaciones tractando, "Valdivia" nuevamente está sobre el mar, a flote, desplazándose hacia aguas de mayor profundidad.
Lo que vino después traten de imaginar quienes no estuvieron ahí:
Todos los buques tocando sus sirenas, bengalas en el aire, gritos de júbilo, emoción en cada comunicación radial, los buques auxiliares cumplieron el pacto e izaron en su palo.....un loly gigante inflable en señal de la tarea que nos tocó........y ahí estaba yo:
Con los brazos en alto, las manos empuñadas y los ojos llenos de lágrimas y a la vez gritando: "¡lo hicimos, mierda, lo hicimos! "
Ese día pasó a formar parte de los recuerdos de dias más felices de mi vida.
Después del logro, todos los buques Escuadra largaron remolque dejando un boyarin atado al extremo de la linea de remolque para recuperar. ¿Quien lo haria?
Adivinen: los remolcadores que a partir de ese instante nos autodenominamos "Los municipales"
Se estuvo preparando por casi 2 semanas a la barcaza, trayendo material para sus cajones de cemento, apoyo logístico y demás tareas. Ya queríamos regresar a casa.
La escoltamos hasta Talcahuano, donde entraría a reparaciones. De ahí rumbo a Puerto Montt, en solitario.
Al entrar al Chacao, de nuevo con corriente a favor, 9 nudos. En total dimos 20 nudos en el cruce. Nada nos podría detener ahora.
Recalamos cerca del medio día. Portalon abierto, franco y descanso por al menos 3 días. Estoy a punto de llegar a casa y medito:
"Solo eran reparaciones en marzo y ya es 10 de agosto....creo que me perdí algunos capítulos de mi hogar".

-¡tío!, (mi sobrino me trae de vuelta a la realidad) pero ¿como aguantaron eso?
- Puede que para ti sea incomprensible, pero cuando confías en tus camaradas y tienes voluntad, puedes lograr lo imposible.
-Pero era solo un buque....
-Si, un buque con un lema en bronce como los demás que ayudaron a rescatarlo : "Vencer o Morir" , su dotación le daba el alma, era más que un buque. Nos dijeron que era imposible, así como en algún momento se lo dijeron a Prat..... la historia que vino después ya la conoces.
- Si, tío. Ahora te comprendo. Luego de eso me dio un fuerte abrazo. Fue su manera de disculparse por pensar que ser marino y llevar el uniforme es algo relativamente fácil.

FIN